Según informaban ayer algunos diarios de tirada estatal, el Ministerio de Fomento está ultimando el plan de recortes en líneas de cercanías y media distancia de Renfe. Esto quiere decir que a partir del año que viene, Renfe dejará de operar en líneas como la de Valencia-Cuenca-Madrid al no tener la consideración de Obligación de Servicio Público.

Sin embargo, un informe realizado por la Plataforma del Ferrocarril Público y Social de Cuenca niega que esta línea férrea convencional sea deficitaria. Según este informe sólo el tramo entre Siete Aguas y Valencia-Sant Isidre suma 97.840 pasajeros. Los datos aportados desvelan que entre Cuenca y Madrid viajaron en AVE durante 2011, 45.768 viajeros y en el tren convencional  37.692, mientra que entre Cuenca y Requena 588 en el AVE y 5.610 en el convencional.

Compromís por Siete Aguas considera que se ha ido abandanonando la línea por diversos factores: primero por la retirada en los años 80 de las unidades Talgo III que circulaban por esta línea; segundo por el abandono consciente de las estaciones y apeaderos de ámbito rural como la de Siete Aguas (que se en cuentra en un estado lamentable);  tercero por el “destierro” premeditado de la línea C3 a una zona suburbana alejándola del centro de la ciudad de València y de la Estación del Norte,  y por último por la promoción de un AVE destinado a clases con alto poder adquisitivo, caro y alejado de los núcleos rurales.

La coalición valencianista y ecosocialista también recuerda que la proposición no de ley sobre la ampliación del Plan de Cercanías de la Comunitat Valenciana, para la remodelación de la estación de tren de Siete Aguas, presentada por nuestro grupo parlamentario pasó el pasado  16 de noviembre de 2011 el primer trámite parlamentario en la mesa de les Corts Valencianes. Y que está pendiente de aprobación en la comisión de Infraestructuras y Transporte donde se debatirá y donde los diferentes grupos políticos deberían aprobarla por responsabilidad política como gesto a las necesidades de los pueblos menores del interior valenciano y frente a los ataques del Gobierno del Estado que solo busca una mayor efiencia económica olvidándose de la función social de este transporte.

Con todo esto Compromís por Siete Aguas considera que, de nuevo, el Gobierno central con el consentimiento del gobierno autonómico, se olvida de las clases más necesitadas como la población trabajadora, mujeres, mayores, jóvenes y parados, así como de los municipios de marcado carácter rural, sin tener que en cuenta que una promoción y mejora de los servicios del tren convencional ayudaría al crecimiento de la población en los ámbitos rurales, atraería visitantes ocasionales ayudando así al comercio local y tradicional y se ganaría en eficiencia social ahorrando en accidentes, contaminación acústica o impacto sobre el medio natural.