Esta organización agraria apuesta por cambiar nuestra comercialización del vino basada en el low cost y el granel
LA UNIÓ de Llauradors indica que un productor de vino de la Comunitat Valenciana percibe un 60% menos por el precio de su cosecha en relación a otro por ejemplo de las comunidades autónomas de la Rioja o Castilla y León, de acuerdo a los datos conocidos tras finalizar la campaña de este año.
Un agricultor riojano o castellano-leonés ha recibido un precio medio por encima de los 0,80 euros/kg, mientras que un valenciano ha percibido de media la cantidad de 0,32 euros/kg, cifra superior sin duda a la pasada campaña que fue de alrededor de 0,16 €/kg.
La diferencia de precio se debe a las diferentes formas de comercialización del vino, pues mientras unas denominaciones de origen apuestan por la calidad y el origen, la nuestra está caracterizada por el “low cost” y el vino a granel. Esta política comercial repercute directamente luego en el precio que perciben los agricultores de cada denominación de origen y no tanto la calidad de la materia prima. Así, no es extraño que de determinadas zonas se lleven vino de nuestras zonas de producción para embotellarlos en otras DO.
La producción de vino en la Comunitat Valenciana ha sido finalmente de 240.000 Tm, lo que supone un descenso del 20% en relación a la pasada campaña. En la DO Utiel-Requena se han producido 155.000 Tm con un descenso del 20%, el mismo descenso de la DO Alicante cuya producción estaría próxima a las 27.000 Tm. La DO Valencia, con una producción cercana a las 57.000 Tm, ha disminuido una 15%. La producción de la IG Vins de la Terra de Castelló con 1,5 Tm ha sido similar a la de la 2011-2012.
Los efectos de la sequía se han notado de manera desigual según subzonas de cada denominación de origen y en algunos casos, como la comarca de Utiel-Requena, la variación de producción ha estado en función de la disponibilidad o no de la parcela del riego de socorro.
Es importante resaltar que la merma de producción como consecuencia de la sequía ha provocado que al final los ingresos totales para los productores de vino de la Comunitat Valenciana no vieran reflejados ese clima de euforia que se respiraba en el transcurso de la campaña en determinados sectores. En algunos casos por ejemplo los viticultores han perdido dinero en relación a la anterior campaña, porque a pesar de ver aumentado el precio de la uva han tenido un descenso importante de cosecha.